Farfugium japonicum
Nombre común: Boina de vasco
Familia: Asteraceae
Orden: Asterales
Subclase o clase: Asteridae
Sector: Astéridas
Lugar de procedencia: Sur de China y Este de Asia
Época de floración: Entre septiembre y noviembre.
Descripción
Sus grandes y decorativas hojas en forma de boina han hecho de esta herbácea perenne de origen japonés una estrella de los patios. Conforma atractivas matas de unos 50 a 90 centímetros de alto y ancho, que viven perfectamente en maceta. En otoño produce largas varas que se ramifican para ofrecer pequeñas margaritas de brillante color amarillo. Tolera hasta -17° (zonas 7-10), por lo que puede vivir bien al aire libre en la mayor parte de España. Cuando la temperatura baja de -6° el follaje se marchita y se pierde, aunque el rizoma le permite rebrotar en primavera.
Las matas se despliegan formando un abanico de hojas habitualmente verdes, de textura coriácea, aspecto brillante, borde liso y largo pecíolo. Suelen medir entre 20 y 25 centímetros de diámetro (en la variedad ‘Giganteum’ llegan a medir entre 30 y 45 centímetros). Entre septiembre y noviembre, largas y finas varas florales sobresalen de las matas luciendo corimbos de margaritas amarillas de 2,5-5 centímetros de diámetro.
Hábitat y exigencias culturales
Prefiere los suelos humíferos, ricos en materia orgánica, bien drenados y medianamente húmedos, pero no encharcados. Necesita riego regular, más profundo en verano. El exceso de sol, sobre todo en las regiones de veranos muy calientes, puede provocar marchitez en las hojas, por lo que conviene situarla en sombra parcial o sombra.
Usos
Farfugium japonicum contiene alcaloides tumorígenos (según Journal of Food and Drug Analysis).